Uf! el día de ayer fue uno de esos días que quedan en la memoria, minimo dejan pensando. Pasó que empezó siendo uno de esos días en que me arrepiento de haber despertado, cansada y por ende choreada, además el aporte familiar...dejemoslo así. Por lo mismo, pensaba en que lo poco de Fe que me quedaba, se estaba yendo al tacho, siempre pienso que los demás van a entender lo cansada y estresada que estoy (las huinchas...)y que ni el de arriba (el Jefazo) me oye, bueno después de mis pensamientos entre teologicos, misticos, psiquiatricos, pasó algo que de verdad me dejó plop!. Mi hija menor se afiebró de un rato a otro así sin ton ni son, ¡y bien afiebrada!, y para mí eso es señal de que puede venir una convulsión, salir corriendo al hospital, en fin mil cosas, me pone muy mal, muy mal, por lo mismo inconcientemente ( o conciente)empiezo a pedir que no pase nada, invoco a todos los santos, La Virgen a Dios en fin a todos desde capitan a paje, en resumidas cuentas no pasó nada, gracias a todos, no sucedió nada, al ratito, andaba como si nada.
Por la noche mientras mi pequeña dormía y yo la vigilaba, pensaba en que Dios, si me oye, pasa que uno debe aprender a "luchar" en esta vida sin que el Padre este siempre metido para ayudar, creo que debo empezar de nuevo...
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